El estar adentro de La Institución Educativa Nicolás Buenaventura no es sinónimo de seguridad para los profesores y estudiantes que comparten el espacio educativo. Esta última semana se han presentado situaciones de inseguridad y violencia que tienen preocupados, y con miedo, a toda la comunidad del colegio. El último hecho que se presentó fue la agresión por parte de una madre de familia que golpeo a una profesora.

En horas de la mañana del pasado martes, la madre de familia Yesica Ramírez, se dirigió hasta la institución educativa para verificar la matrícula de su hijo en el grado transición, pero no aparecía en el listado publicado.

La docente encargada de ese grado, Jaqueline Velásquez, le informó que su hijo no aparecía en el listado porque no estaba matriculado. “La madre no había hecho el proceso de matrícula, lo que hizo en noviembre fue la inscripción. Para la fecha ya no había cupo para el grado transición, pero como se retiró una niña, la maestra decidió darle esa vacante, para lo cual debía traer los papeles para oficializar la matricula”, contextualizó para este medio digital la rectora de la institución, Yohana Díaz Carreño.

Cuando la madre volvió con los papeles, el registro civil del menor no era legible. Entonces la maestra le solicitó que trajera otra copia o el documento original. La solicitud de la maestra irritó a la acudiente, que salió del aula de clase y espera a la docente en el pasillo principal del plantel educativo para agredirla.

La profesora Velásquez recibió múltiples golpes en el rostro, brazos, abdomen y espalda, y fue arrastrada por los cabellos por el plantel educativo hasta  que se desmayó. Madres y personas que presenciaron el hecho trataron, reiteradamente, de separar a la agresora de la maestra, pero no lo consiguieron de ningún modo.

De acuerdo a una fuente consultada por Seguimiento.co (medio aliado de Zona Cero) la mujer de aproximadamente 23 años, “gritaba que la sacó barata porque donde la hubiera cogido en la calle le hubiese ido peor, si hubiese tenido un cuchillo la hubiese chuzado”, afirma.

Luego de presentarse el hecho, la Policía del cuadrante atendió  el llamado de los docentes. La madre agresora fue detenida y el pasado miércoles fue dejada en libertad, con el compromiso de asistir a unos talleres de capacitación y convivencia.

“La madre reaccionó de esta manera porque ella sintió que le estaban dándole el cupo de mala gana”, concluyó una de las personas del plantel educativo que presenció los hechos.

Otros casos de inseguridad

Pero esta situación no ha sido la única. Esta última semana dentro de la institución se han presentado robos. “El pasado Lunes una maestra dejó su celular en el salón y por las cámaras se observa cuando una señora entra y el celular no apareció”, afirmó la rectora, quién además agregó que como está llegando persona de todos lados, no se puede tener un control del personal.

No es la primera vez que el colegio Nicolás Buenaventura ha presentado este  tipo caso de violencia. En mayo de 2016, el entonces coordinador, Milton Payares, fue víctima de amenazas por parte de un exestudiante.

Esta situación llevó a que el docente fuera reubicado de la institución en Junio de 2016 por amenaza directa contra su integridad física. Este mismo estudiante también amenazó con lanzar una granada a otra sede de esta institución. Estas situaciones alarmaron a toda la comunidad educativa.

La situación ha llegado a extremos de que un estudiante amenazó con lanzar una granada a una sede de la institución: rectora

“Pedimos que la comunidad sea respetuosa y tolerante. Debemos hacer un equipo para construir un plantel educativo solido que al final va a servir para el crecimiento en valore de todos los jóvenes y niños que hacen parte de nuestra institución”, afirmó Díaz.

En la tarde de este jueves se realizará una asamblea de docentes con la secretaria de educación donde asistirán los padres de familia y autoridades de policía.